Gigantes y Tren, ¿Qué versión veremos en el Round Robin?
02/01/2023 6 Minutos de lectura

Gigantes y Tren, ¿Qué versión veremos en el Round Robin?

Los maquinistas del Tren del Norte buscan su primera final y título de LBPN, mientras que los Gigantes de Rivas buscarán celebrar por lo alto su décima temporada de LBPN, y no hay mejor manera de hacerlo que con la meta trazada del cuarto título. ¿Tienen el material suficiente para lograrlo? Analicémoslo.

Paolo Araquistain | Prensa LBPN

El Round Robin iniciará para Tren y Gigantes con una mini serie entre sí, martes 3 de enero en Estelí, y el miércoles 4 en Rivas. La serie en la etapa regular entre los norteños y sureños quedó con balance de 4 triunfos por bando, siendo los únicos equipos con series empatadas, dejando claro de lo aguerrido que fue. Gigantes ganó tres veces en Estelí, y Tren se desquitó ganando tres veces en Rivas. El Tren noqueó a Gigantes 14x4 en el Rufo Marín, y los rivenses se desquitaron en el mismo escenario noqueándoles 12x2. Así de cerrado estuvo este particular duelo, pero analicemos que veremos en general de cada equipo en el Round Robin.

Tren del Norte

El Tren del Norte tuvo dos caras en la temporada regular, una con más derrotas que victorias, pues en los primeros 16 juegos ganaron 7 y perdieron 9, pero estaban aún en el cuarto lugar, aún bajo el mando de Aníbal Vega, quien dirigió hasta el 14 de diciembre, y tras perder ante Tigres en Estelí por tercera vez en los últimos tres juegos ante ese rival, la junta directiva decidió hacer un cambio de manager. Eloy Morales fue el designado para la misión de sacar al equipo de la última posición, teniendo solo 11 juegos por delante, y con un balance de 8 victorias y 13 derrotas, a dos juegos y medio de la cuarta posición de clasificación.

No sé exactamente qué diría Eloy en los mítines previos a cada juego, pero sin cambiar drásticamente el lineup y sin innovar en sus abridores y bullpen, estos comenzaron a carburar todo lo que seguramente planeó en algún momento Vega, pero que no se vio en sus resultados, sino en los de Morales.

Antes de Eloy, el Tren era segundo en bateo colectivo con .276, fabricando 5 carreras por juego, y era el peor pitcheo de la liga con una efectividad 5.22, permitiendo 6 carreras por juego como mínimo. Al finalizar la temporada regular, el Tren del Norte que comandó Eloy consiguió ganar 10 de 11 juegos que dirigió, 9 de ellos de forma consecutiva, y ahora el Tren quedó como el equipo de mejor bateo con .293 de promedio ofensivo, anotando 7 carreras por juego, y en pitcheo su efectividad bajó a 5.13, permitiendo las mismas 6 carreras por juego, es decir, mejoró ligeramente el pitcheo, y mejoró drásticamente el bateo.

Para este Round Robin se espera ver a un Tren del Norte apoyado siempre en su ofensiva, sobre todo tras agregar la ofensiva de Rubí Silva, quien también cubrirá seguramente el jardín izquierdo, pero no es la única variante, también podría ser la segunda base, y con eso pasarían a Lago a jugar tercera, quedando Elián Miranda en primera, y Renato Morales en el jardín izquierdo.

La rotación del Tren recayó en el mejor abridor extranjero de la liga, Edgard Martínez, quien ganó cuatro juegos, y Luis Ramírez, quien ganó otros cuatro. Los brazos 3 y 4 son inciertos, aunque tienen a Victor Doñé, con una salida de cal y dos de arena, y Julio Frías, quien fue inscrito en las últimas horas permitidas, pero debutará en el Round Robin, viene de lanzar en Venezuela. Los brazos de la rotación dejaron una efectividad colectiva de 3.35, lo cual es fenomenal, caminando un promedio de 5 innings, pero el talón de Aquiles es el bullpen, mismo que no ha logrado definir un cerrador, ni los relevos intermedios seguros, van desfilando a ver cual hace el trabajo. La efectividad del bullpen en la temporada regular fue de 6.94, es decir 7 carreras limpias por cada 9 episodios, una completa barbaridad.

Para avanzar a la gran final, el Tren dependerá de los dos brazos confiables, Martínez y Ramírez, y que estos caminen 7 u 8 innings, porque está claro que entregarle un juego al bullpen desde el 5to o 6to inning, deberá ser con una ventaja de 6-7 carreras para que no la pierdan, la ofensiva tendrá ese reto, pues su productividad no anda lejos de esas exigencias, por algo ganaron 10 de los últimos 11 juegos. En resumen, la ofensiva y la rotación abridora del Tren reúne las condiciones para decir que tienen material para estar en la gran final, pero el bullpen y la defensa, la segunda con más errores, es lo que genera las dudas en el equipo de Eloy Morales.

El Tren del Norte le ganó 5 de 8 juegos a Bóer y Leones, y 4 juegos más a los Gigantes, es decir, no perdió ninguna de las series ante los rivales que tendrá enfrente en el Round Robin. Conocen perfectamente cual es el camino para vencerles, y eso nos dice claramente que es uno de los equipos a tener muy en cuenta con la etiqueta de serio candidato para la gran final, la cual sería su primera entres temporadas de participación.

Gigantes de Rivas

Los Gigantes es un equipo conocido en estas instancias de postemporada. Es su novena edición clasificando más allá de la temporada regular, buscando su octava final, y lo que podría ser su cuarto título. Es un equipo confeccionado para ello desde el primer día, pero el rendimiento bajó del cielo a la tierra después de la primera mitad, cuando llegaban con 10 triunfos y 6 derrotas, pero en la segunda mitad fue exactamente lo opuesto, 6 triunfos y 10 derrotas. Situación que motivó a hacer cambios con algunos peloteros extranjeros y en el bullpen, mismo que dejó escapar varios resultados cuando ganaban hasta con cierta comodidad.

La rotación de Rivas estará encabezada por el mejor abridor nicaragüense, Ronald Medrano, pero la verdad es que no solo él ha hecho bien las cosas. Los brazos de Crawford y Sanó se deben de tomar en cuenta, pues han sido habituales abridores y entre los tres han sumado aperturas de calidad (6 innings), o muy buenas (5 innings). Hablo de 6 aperturas de calidad/buenas ante el Tren del Norte, 5 aperturas de calidad/buenas ante el Bóer, y 4 aperturas de calidad/buenas ante León.

Ese 1-2-3 en la rotación puede marcar la diferencia en esta nueva etapa, sobre todo con lo reforzado que luce el bullpen con la llegada de los brazos extranjeros de Víctor Capellán, Samuel Adames, y Euclides Leyer, todos con amplia experiencia en el béisbol invernal caribeño. Igualmente, los brazos de Osman Gutiérrez, José Acosta y Carlos Teller complementarán ese bullpen que luce notablemente mejor que el que permitió perder varios juegos que ganaban con comodidad.

A nivel de los cuatro equipos, la rotación con esos 3 brazos sólidos y el bullpen con los seis nombres dados, reflejan una seguridad importantísima, y que no se ve en el resto de equipos. Entonces, ¿Cuál es la duda con los Gigantes? Su bateo y su defensa. Si, lo que en temporadas anteriores ha sido su mayor fortaleza, este año es su mayor debilidad.

Al 7 de diciembre, fecha del 50% de la temporada regular, los Gigantes eran el mejor equipo ofensivo de la liga con .285 de promedio, fabricando casi 7 carreras por juego a través de 10 imparables por juego. No obstante, al cerrar la temporada regular, ese registro cayó de forma severa a un promedio de .252, fabricando 5 carreras por juego, y 8 imparables por juego. La defensa también decayó, en la primera mitad permitieron 7 carreras sucias, y en la segunda mitad fueron 14 carreras sucias. El no tener un catcher de trayectoria en estas instancias les podría pesar también, algo que no les sucedía con Luis Alen, el mejor receptor que ha venido a Nicaragua en los últimos 10 años. Estrada y Rivera se han turnado en la temporada, pero se ha visto como muchas veces los lanzadores de mayor experiencia no se sienten 100% cómodos con ellos, sobre todo los que cuentan con hoja de vida en el béisbol internacional.

En resumen, según mi criterio, los Gigantes tienen la mejor rotación abridora con tres brazos conocidos en los que se pueden confiar en estas instancias, y su bullpen es único, con cuatro brazos extranjeros, y dos lanzadores de selección nacional, en el caso de Osman y Teller. Sin embargo, su incognita es su ofensiva, misma que cerró dormida en la segunda mitad del calendario, salvo algunos desafíos como en el último, y su defensa, sobre todo en la receptoría.

Este lunes los Gigantes agregaron a Brandon Leytón pensando en sus problemas ofensivos y en defensa, al bate ayudará a tomar bases en la parte alta del lineup y su guante dará solidez a un infield de lujo con puros guantes de selección nacional: Cheslor en tercera, Marín en el campo corto, y Leytón en segunda. En la inicial se podrán turnar Wuillians Vásquez y Ofilio Castro, y el que no esté con el guante, seguramente lo hará como designado, pues Jesús Valdez pasará a jugar a los jardines. Pero como volvemos a ver, la única posición que no tiene dueño en el infield es la receptoría, pues ninguno de los dos receptores nicaragüenses, Estrada y Rivera, se han ganado al 100% la posición, ya sea porque no batean lo requerido, o porque no tienen el mejor de los manejo a la hora de llamar a los lanzadores. Veremos si sorprenden para bien en esta instancia crucial.

Por el pitcheo, tanto abridor como de bullpen, si considero a los Gigantes como un equipo a tener en cuenta con etiqueta para una gran final, pero el bateo de los últimos 16 juegos es lo que me hace dudar, pero está claro que si ese bateo despierta en estas instancias que más necesitan, será difícil pararles, pues sería un equipo muy completo. Esa incógnita de la ofensiva es la que no me deja asegurar al 100% que los Gigantes estarán en la final, porque con una semana mala en su ofensiva en esta nueva etapa, estarían con los pies hinchados, pues solo son doce juegos, pero bueno, todo puede pasar. Amanecerá y veremos.

En la temporada regular, el "papa" de los Gigantes fue el pitcheo de León, quien les derrotó en 6 de 8 juegos, pero se mostró una notable mejoría en su ofensiva en los últimos dos desafíos ante los melenudos. Ante el Bóer le ganaron la serie particular 5-3, y empataron serie con el Tren 4-4, siendo su mayor verdugo el dominicano Edgard Martínez, quien les lanzó 4 veces, con 4 aperturas de calidad, y logró ganarles 3 veces.

Es raro, pero es la realidad, esta vez los Gigantes no son los grandes favoritos para estar en una serie final, como si nos han acostumbrado en las temporadas pasadas, pero tal vez ese factor les motive a retornar durante este Round Robin a las características con las que si se dieron a conocer en nuestra LBPN, llegando a disputar cinco finales consecutivas, en sus primeras cinco temporadas.