Feroces artilleros pasaron por nuestros estadios, desde aquella Profesional desde hace más de 60 años, y ninguno pudo abrazar al mismo tiempo los títulos de bateo, jonrones y carreras impulsadas. Lo más aproximado había sido en pitcheo, y dos veces.
Primero fue el estadounidense del Bóer, Jack Kralick en la tercera temporada, 1958-1959, cuando ponchó a 118, tuvo efectividad de 2.48 y ganó 14 juegos, compartiendo el liderato con Eddie Locke, del Cinco Estrellas. Fue la temporada en que hizo su aparición con el Cinco Estrellas el slugger estadounidense Marvin Throneberry, que impactó con sus batazos, siendo campeón jonronero (16) y de bateo, con .344.
En la novena temporada, 1964-1965, el nicaragüense René “El Ñato” Paredes, jugando con el León, logró la Triple Corona, al ser el más efectivo, con 1.92, más ganador, con 13 y ponchador, con 132.
Ese año las coronas ofensivas quedaron repartidas. El panameño Manuel Antonio Díaz (Copa Castillo), del León, se coronó en bateo con .354, el estadounidense Jim Hicks, también con el León, conectó 18 jonrones y el cubano del Cinco Estrellas, Rogelio Alvarez, impulsó 54 carreras.
Desde entonces, pasaron 48 años para que el sueño se disipara, y en poco tiempo hemos sido testigos de cuatro Triples Coronas, dos en ofensiva y dos en pitcheo.
El curazaoleño Yurendel De Caster impactó en la octava temporada de la LBPN, 2012-2013, al ser el primer Triple Corona en nuestros Campeonatos Profesionales. Con los Tigres de Chinandega, que fue el equipo Campeón, De Caster impuso récord de bateo con .416, de impulsadas, con 56 y compartió el título de jonrones con el nicaragüense Ramón Flores, compañero de equipo, ambos con 13.
Marlon Abea en la primera temporada (2004-2005), Clyde Williams en la tercera (2006-2007) y Lenín Aragón en la quinta (2009-2010), se quedaron con las coronas de jonrones y empujadas, siendo frustrados respectivamente por Adolfo Matamoros, Justo Rivas y Jimmy González, que fueron los de mejor promedio ofensivo.
El venezolano nacionalizado nicaragüense Wuillians Vásquez, fue el segundo bateador de Triple Corona, al brillar con los Gigantes en la décimo-segunda temporada (2016-2017). Esa vez fue campeón de bateo con .407, en jonrones con 11 y empujadas con 55, todo válido para ser nominado el Más Valioso.
Las Triples Coronas de pitcheo le correspondieron al dominicano Rodney Rodríguez, con el Bóer en la décima temporada (2014-2015), en la que lanzó para 2.29 de efectividad, ponchó a 58 y ganó 8 juegos, compartiendo el premio con Paul Estrada, de los Tigres, para ser el Más Valioso. Cuatro años atrás, en la VI edición, Rodney ganó las coronas de triunfos (8) y ponches (93), pero Carlos Pérez fue el más efectivo, con 1.19.
La pasada temporada (XIV, 2018-2019), el dominicano Luis Mateo, del León, ganó la Triple Corona. Fue líder en efectividad, con 3.29, máximo ponchador con 35 y ganó 3 juegos, compartiendo ese premio con Manauris Báez (Bóer), Berman Espinoza (Gigantes) y Jorge Bucardo (Bóer).
A punto de volver a la acción en la LBPN, ¿veremos otro Triple Corona?
